Hoy celebramos el 100 aniversario del nacimiento de Carmen Laforet.
Volví a leer “Nada”, hace escasos meses como propuesta literaria de mi club de lectura.
Reconozco que me encanta releer libros después de muchos años, pues siempre tengo la curiosidad de saber si esta lectura despertará en mí una nueva sensación, fruto del inevitable paso del tiempo.
“Nada” recrea la historia de una familia catalana, cuya existencia transcurre en una constante cuerda floja, en un ambiente siempre lleno de tensión, reproches y violencia. Y ahí se encuentra la recién llegada Andrea, que deambula por Barcelona a caballo entre ese caótico mundo familiar, y uno nuevo, totalmente opuesto, de su recién estrenada etapa universitaria.
Y, a pesar del transcurrir de los años, sigo identificándome con esa joven llena de ilusión, que sobrevive a los avatares de su propia existencia, y la de los demás.
Al final, un halo de esperanza y de optimismo.
Esos finales que tanto me gustan.